Desde pequeño escucho voces y cada una de ellas tiene un extraño poder sobre mí. No hablo de que vuelo con capa y uso ropa interior encima de mi pantalón. Eso sería horrible, al menos para quienes me vean así.
Hablo de perderme en la imaginación y decir: “¡Qué brutal es poder escuchar estas voces!”
Por ejemplo:
Escucho a Chris Cornell y me siento nada. No en el mal sentido. Hablo en el sentido de no pensar en absolutamente nada. Su voz tiene el poder de llevarme a ese estado o lugar y volver sano, agradeciendo que nadie viera mi cara de idiota en el proceso.
Cuando escucho a Freddie Mercury me siento divino, regio, poderoso. Siento que salgo a la calle caminando como él, con pantalones apretados y guardacamisa, con todos bailando a mi alrededor… algo que también ustedes agradecerán no ver. Bailo horrible y mi cuerpo no tiene forma alguna.
Con Jim Morrison me pierdo entre la poesía y la rabia, entre todo lo que a veces no veo a simple vista. Sobre todo cuando suena Roadhouse Blues. Corre un video musical en mi mente en el cual voy adonde me da la puta gana y nadie me detiene.
Por si te lo preguntabas, no solo escucho voces famosas. También escucho a mis hijos decirme cada día: “Te amo, papá”, y el mundo se detiene.
A ti ¿qué voces te gusta escuchar y por qué?
