Lo primero que sorprende al escuchar Desaparecer es la energía con la que La Mano de Cervantes vuelve a escena. Después de un silencio bastante largo tras su debut De Primera Mano (2022), la banda anuncia su segundo capítulo con un single corto y brillante que servirá como antesala del disco Segunda Mano, previsto para el otoño de 2025. Una declaración breve, pero contundente, que deja claro que hay mucho más por descubrir.
Desaparecer vio la luz el 19 de septiembre y llega como carta de reaparición de un proyecto que juega con la frescura del indie rock, evocando los tintes jangle de los primeros R.E.M. o The Wedding Present. Su sonido tiene una chispa pegajosa que hace mover la cabeza de manera automática, como un guiño a esos veranos en los que lo ligero también se vuelve trascendente.
La canción, aunque breve, se siente completamente bailable. Un recordatorio de que la banda sigue ahí, afinando un lenguaje propio que mezcla humor, anonimato y una clara pasión por las guitarras que laten rápidas.
De lo divertido a lo real
Lo curioso de La Mano de Cervantes es que nació como un juego: a finales de 2021 comenzaron lanzando singles casi en broma, inventando tres miembros ficticios detrás de los cuales se escondía un autor que todavía prefiere mantener el misterio. Su anonimato forma parte del encanto, y aunque los errores de ejecución delatan la mano humana, hay algo en ello que conecta de manera más honesta: canciones hechas sin pretensión, pero con la fuerza de querer existir.
Ahora, con Segunda Mano en camino, el proyecto abre un nuevo ciclo. Un disco que promete ser tan directo como su nombre, sin artificios, con canciones listas para colarse en nuestras playlists de diario.
El título Desaparecer juega con la propia historia de la banda: se fueron del mapa y regresan con más luz. Escuchar este single es como reencontrarse con un amigo después de años: distinto, pero con la misma esencia. Y aunque apenas dura unos minutos, deja ese eco curioso que obliga a esperar con ganas lo que viene.