Hammersmith es un local de eventos situado en el distrito londinense del mismo nombre. Algunos artistas que actuaron allí fueron THE WHO, QUEEN, AC/DC, MOTÖRHEAD, METALLICA y SCORPIONS.
«Hammersmith», que originalmente era un tema extra en la edición británica del último álbum de SCORPIONS, «Rock Believer», no es sólo un himno a un local musical icónico, sino también un manifiesto contemporáneo, que muestra el entusiasmo que todavía tienen por el hard rock, las raíces de su fama y el metal original.
«La canción», dice el cantante de SCORPIONS, Klaus Meine, «nos lleva a una época en la que tocábamos en los clubes más pequeños, soñando con poder actuar en el Templo del Rock, el Hammersmith Odeon».
La música, compuesta por el fundador/guitarrista de SCORPIONS, Rudolf Schenker, el batería Mikkey Dee y Magnus Ax, le da a Meine una gran oportunidad para demostrar que no sólo puede entonar perfectamente los tonos baladísticos de las grandes canciones de SCORPIONS, sino que su voz cañera también es increíble. Un comienzo casi brutal, en el que el gran ex-baterista de MOTÖRHEAD, Dee, ya se está desahogando, seguido de sonidos de guitarra impulsores, abre el escenario para la excursión vocal de Meine.
Mezclado con riffs armónicos, interrumpidos repetidamente por una agresiva batería, «Hammersmith» es algo muy especial en el flamante repertorio de SCORPIONS. Uno de los momentos más destacados es cuando el guitarrista principal, Matthias Jabs, atiza magistralmente sus seis curdas hasta que la canción llega a su final. Como lo resume Meine: «¡Rockea como el infierno!»
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