Desde finales del verano del año pasado, el reto que tenía la producción de este festival era poder superar el pedestal que habían logrado en su 4.ª edición, y podemos dar fe del logro obtenido. La Universidad Complutense en Madrid fue definitivamente de nuevo el cómplice ideal para albergar, durante el viernes 20 y sábado 21, a más de 50.000 fieles amantes de la movida musical española en los distintos géneros.
Bienvenidos al bosque encantado
La 5.ª edición del Festival Jardín de las Delicias nos recibió con una logística de acceso al recinto mucho más pulida y profesional que lo acostumbrado; el “bosque encantado” siguió siendo protagonista, y era muy sencillo toparse con esos personajes que te hacían sumergirte en cualquier cuento escrito por Perrault, acompañado con la banda sonora variopinta que consolida a una España potente en lo que a música se refiere: magia, música, color y fantasía, mezclados entre géneros, edades y formalidad en la despedida de un verano que nos asomó ya las primeras mangas largas y frases como “está haciendo frío”.
La producción supo tomarse muy en serio los detalles técnicos y logísticos que reprobaron en la edición pasada; el sonido de la Endesa Stage, sin quejas, salvo lo que pudiese considerarse bueno para el protagonista del main de cada una de las bandas.
Cada año el público es más protagonista con su fidelidad e incondicionalidad, sembrando más bases en la solidaridad de una movida española que fue desde las leyendas hasta las nuevas propuestas. La buena vibra, la energía, los rostros y outfits hermosos, la iniciativa de “sostenibilidad” es para brindarles aplausos de pie; pero, por el contrario, los precios de bebidas y comidas no fueron tan “sostenibles” como desearíamos. De por sí, fue de las cosas más comentadas el año pasado, y de las que más se hizo caso omiso, siendo más costosas aún en esta edición.
Primera jornada del festival
La 1.ª jornada del pasado viernes 20 de septiembre, acercó a 25.000 fieles que se pasearon entre las dos tarimas. La producción hizo cambios en el área de la Tarima Bosque, buscando solventar los fallos de acceso de la edición pasada, y a criterio de este servidor, mejoró, pero de seguro buscarán alternativas futuras.
Destacables en esta tarima “Bosque”, la banda madrileña con su rock alternativo Ultraligera y el gran espectáculo que nos ofrecieron los Hermanos Martínez con un pop indie de lo más destacable.
En lo que correspondía a la tarima principal, le tocaba el turno a una banda que el año pasado se ganó con creces el poder “subir de categoría”, ya que el año pasado estuvieron tocando en la tarima novel; el sonido indie de Besmaya nos dio un show muy potente.
Ya instalados, le llegaba el turno a Marlon, este trío que pone a todo el jardín en un salto infinito lleno de pop rock, muy entretenido y destacable de la mano de su vocalista.
Por los otros aires en el “Bosque” se dejaba escuchar el cantante y compositor catalán Alex Wall, quien vino a regalarnos sus 10 años de experiencia como solista.
El plato fuerte de la primera jornada dio el lleno total al “Endesa Stage”, y justo a las 22:00 se deja escuchar la batería introductoria más conocida de la movida española que hace honor a su nombre “Voy a pasármelo bien”. Es así, David Summer y su combo toman el timón del Jardín de las Delicias… Llega Hombres G; fueron 60 minutos donde se dejaron escuchar éxitos de décadas: “El ataque de las chicas cocodrilo”, “Si no te tengo a ti”, “Indiana”, “Suéltate el pelo”, y mucho más. Hombres G es una leyenda de la movida española y tiene muy bien ganado su sitial luego de darnos cuatro décadas de su música.
La movida electrónica también es parte del Festival Jardín de las Delicias, y muchos se “atrincheraron” en el Bosque Stage para disfrutar de Barce y, posteriormente, de Mickey Pavón.
Cercano a la medianoche, le toca el turno a La La Love You, este cuarteto de Parla sorprendió a más de uno con su power pop, gran escena que demuestra que sus 17 años de trayectoria no van en vano.
El cierre de la jornada quedó a cargo de Juan Magan, quien, al parecer, se convierte en un habitual del festival y que los presentes no dejan de darle el aprobado a este español-dominicano.
Destacamos que la lluvia fue protagonista entrada la noche, pero no fue impedimento para que esta primera jornada se cumpliera con el éxito esperado.
Segunda jornada del festival
La 2DA JORNADA del sábado 21 ya pintaba un cartel de «Sold Out», y en efecto, el venue se vio “hasta las banderas”.
Inazio es el encargado de abrir la segunda jornada en la tarima principal. Este músico tiene bien ganado el tocar en este stage, luego de su participación el año pasado. ¡Definitivamente este chico tiene talento, y de sobra! ¡Qué buen indie folk de este joven navarro!
De momento, era muy fácil la movilidad por los espacios del festival, donde aprovecho para destacar el buen desempeño de los servicios: gran presencia de seguridad y policía a los alrededores, el acceso para prensa fue un gran “plus”, excelentes stands de patrocinios, buenas alternativas culinarias, pero de verdad, los precios exorbitados en comidas y bebidas son el único contra que pondría.
Llegaba el turno de Malmö 040, banda de chicos catalanes que viene dando pasos agigantados en la movida del pop rock español de manera muy significativa desde hace unos 7 u 8 años; un show compacto, potente y buen sonido; muy destacable el feeling del público con ellos. “La Última Canción” fue destacable en un solo salto de masas y cantada por todo el festival.
Ya para este momento, era bastante complicado moverse hasta la tarima alterna “El Bosque”, y definitivamente deserté en la idea de volver. Sin embargo, alcancé a escuchar un poco de Depol, un chico muy joven nacido en Barcelona, y que, en lo poco que pude escuchar, interpretó “Ibiza”, “Quién Diría”, entre otros.
Ya el sol comenzaba a despedirse para darle el turno a Andy y Lucas, que lograron congregar ya para ese momento un 75% del aforo de la Complutense. El dúo de gaditanos puso a cantar y bailar durante una hora a todos los presentes, desde su primer tema “Faldas” hasta el más que nunca famoso tema “Son de amores”; se dieron el gusto de subir fans a la tarima, e inclusive regalar franelas a los asistentes. Impecable show, buen sonido.
Francisco Javier Álvarez, mejor conocido como Beret, no se quedó atrás con un show muy respetado, que se llevó a toda la Complutense en un bolsillo y en el corazón.
Un festival que se consagra en Madrid
Se presagiaba un desborde de masas en el sitio, y así fue, un Jardín de las Delicias donde no cabía un alfiler. Y ya a las 22:00 horas toman tarima, lo que para muchos es la mejor banda de pop española, La Oreja de Van Gogh.
Aquí quiero hacer una gran pausa… ¡Increíble e impecable el sonido de esta banda, mis respetos para su Ingeniero de Main, un sonido limpio y perfecto!
28 años de carrera no pasan en vano. Un público entregado a la hermosa voz de Leire Martínez hizo que, durante una hora exacta, la complicidad del público con estos vascos fuera mágica.
Si hay algo que tenemos claro de la movida española, es que en Murcia han nacido muy buenas bandas, sobre todo en lo que a indie se refiere, y por ello el Festival Jardín de las Delicias en esta edición nos regala bien entrada la noche a Viva Suecia, que no es una banda, ¡es una PEDAZO de banda! ¡Increíbles! Desde “No hemos aprendido más” hasta “El bien”, estos chicos se llevan ovación y respeto del supremo.
Para el cierre, es el turno de unos consentidos de este festival y de Madrid: Taburete. ¡Aquí se prende la fiesta con una mezcla de géneros y con cánticos de un público feliz por lo vivido, para darle un cierre con broche de oro a esta 5ta edición, que definitivamente consagra a este festival como uno de los más importantes de Madrid!
Queremos agradecer, como siempre, al equipo de “Jardín de las Delicias”, quienes siempre nos dan la oportunidad de poder vivir esta maravillosa experiencia, y esperamos poder estar con ustedes en el cierre de verano 2025.
