Aunque Gato García tiene rato en la escena, con su nuevo EP OG: Original Gato termina de afilar sus liricas. Sin poses ni etiquetas innecesarias, el rapero caraqueño establecido en Madrid nos presenta un trabajo que se siente sincero y sin necesidad de gritar para que lo escuchen.
Son seis temas inéditos donde cada línea tiene su lugar. Se pasea entre el trap, el drill y hasta con un toque con el funk, pero lo hace sin perder la raíz de ese hip hop clásico que ha sido su columna vertebral desde los días de Diversos Rap.
Gato pertenece a una nueva camada de artistas que crecieron influenciados por las leyendas de Venezuela. En su caso, el peso y la visión de pioneros como DJ Trece no solo lo marcaron: lo empujaron a entender el rap como una forma de vida. Esa línea directa entre lo que sembró La Corte y lo que ahora se cultiva en otras latitudes se escucha en la base de las liricas de OG: Original Gato.
Producido junto a Ron Hernández, Kadma Beats, Killzbeatz y Saint Vega, este EP es una prueba de que el hip hop venezolano sigue evolucionando, incluso desde fuera de casa.
Y aunque hoy reside en Europa, Gato no ha perdido el acento ni la calle, ni mucho menos las ganas de sumar a la historia que ya empezó con quienes abrieron las puertas. Con presentaciones ya en Madrid, Barcelona, Groningen y próximamente en Praga, es claro que su propuesta no se quedó en el underground: está cruzando fronteras sin perder la esencia.