KHUS presenta Talo, una pieza sonora que desafía las convenciones del pop y la electrónica desde una propuesta visceral, política y profundamente íntima. Con un enfoque multidisciplinario que cruza cuerpo, palabra y performance, este nuevo lanzamiento se inscribe dentro de un universo donde la música no solo se escucha, también se encarna.
Un cuerpo que suena: rituales digitales y memoria ancestral
Este nuevo sencillo es mucho más que una canción. Es una declaración de intenciones. Desde la percusión orgánica hasta la atmósfera sintética que la envuelve, cada capa sonora construye un espacio ritual, visceral y expandido. KHUS, nombre artístico de Aline Sandoval, canaliza su herencia latinoamericana para crear una experiencia que vibra entre lo tradicional y lo afrofuturista.
El término khus, en quechua, significa cuerpo, y esa idea atraviesa su propuesta artística: el cuerpo como archivo vivo de memoria, migración, mestizaje y resistencia. Talo se presenta entonces como una invocación —una danza de pulsos digitales e invocaciones antiguas que abren portales entre lo íntimo y lo colectivo.
De los Andes al mundo: una propuesta en expansión
KHUS ha recorrido escenarios de referencia como BIME PRO, FIMPRO, IMESUR, Primavera Pro, FAM en Francia, entre otros, consolidando su lugar en la nueva escena alternativa y queer de Latinoamérica y Europa. Su trabajo ha sido destacado por medios como RedBull Music, IndieHoy, Shock, LatFem y Nación Réfix.
Talo forma parte de lo que será su primer álbum de larga duración, previsto para 2025. El disco está siendo creado en colaboración con artistas y productores internacionales, proyectando una narrativa sonora transfronteriza, profunda y radicalmente contemporánea.
