El metal perdió a uno de sus pilares. Tomas Lindberg, mejor conocido como Tompa, murió este 16 de septiembre de 2025 a los 52 años, tras una larga batalla contra un cáncer extraño y agresivo que lo acompañó desde finales de 2023.
Originario de Gotemburgo, Lindberg fue parte esencial de la ola sueca que transformó el metal. Primero con Grotesque y más tarde con At the Gates, banda que fundó en 1990, dio forma al death metal melódico. Discos como The Red in the Sky Is Ours y el clásico Slaughter of the Soul se convirtieron en referencias obligadas para generaciones de músicos y oyentes.
Un legado que definió el género
Su voz era emoción pura: un rugido que contenía poesía oscura, rabia y vulnerabilidad. Durante su carrera también participó en proyectos como Disfear, Skitsystem y Lock Up, demostrando una amplitud creativa que sorprendió hasta el final.
En diciembre de 2023, a Lindberg le fue diagnosticado un carcinoma adenoide quístico. A pesar de cirugías y tratamientos de radiación, continuó creando música. Justo antes de ser operado, grabó las voces para el nuevo álbum de At the Gates, sabiendo que quizás sería su última contribución.
Las muestras de afecto no se hicieron esperar. At the Gates compartió un mensaje contundente: Tomas, eras inspiración para todos nosotros. Siempre estarás en nuestra memoria. Colegas, músicos y seguidores alrededor del mundo lo recordaron como alguien que dejó todo en cada escenario.
El eco de Tompa en el metal
Cada rugido de Tompa cargaba con la historia del género y la calidez de un músico que entendía la música como un puente entre personas. Escuchar sus discos hoy es recordar su coraje, su sensibilidad y su entrega sin concesiones. Su legado seguirá vivo en cada riff y en cada concierto donde su voz siga retumbando.
