Athlete, pasados 20 años, nos recarga la nostalgia y el melodrama sonoro.
Tengo que confesar que la llegada de esta reedición es de las cosas que más me han emocionado en estos últimos años.
Este trabajo, en su versión original, llegó a mí hace unos 15 años atrás, gracias a un amigo (César Serpa), quien me dijo: “Esto es un discazo, Iván, lo compré en un mercadillo en Londres, escúchalo”; desde la primera canción me atrapó, y entendí que, más allá de que todo el mundo escuchaba Coldplay, había muchas otras cosas interesantes en la movida.
El disco, nacido en 2005, fue un éxito en ventas y muy bien evaluado por la crítica, llegando al N.° 1 en la lista de álbumes del Reino Unido.
Tourist fue un cambio radical desde el debut de la banda en el 2003 con Vehicles & Animals; el disco se convirtió en una representación muy seria de lo que era el neobritpop en su momento, con melodías muy emocionales y, más aún, un sonido impecable que nos llevaba a un paso más de lo vulnerable.
Pero, en lo particular, la banda siempre demostró que, más allá de su increíble sonido y la maravillosa voz de Joel Pott, había una intención muy profunda, emocional e, inclusive, dolida en sus letras; algo que manejaron como banda de forma muy madura, lo cual no genera ningún tipo de presión en la propuesta.
20 años después, Athlete en vigencia de la manera más expansiva
Este cuarteto, nacido en Deptford, Londres, nos presentó en marzo de este año una reedición de Tourist en doble vinilo + bonus 7”, donde podemos disfrutar de una nueva versión remasterizada de Phil Kinrade de los 11 temas, con éxitos tales como: Wires, Half Light, Chances y mucho más.
El bonus en formato de vinilo de 7” trae un tema inédito, Lay Your Head, que tiene como protagonista sonoro un piano y una batería increíble, que se complementa con coros maravillosos. Es una canción simplemente ¡hermosa! Se complementa el bonus con un remix de la canción Twenty Four Hours.
Remasterización impecable y rescate emocional
Creo, a mi parecer, que es un trabajo impecable el realizado por Kinrade, considerando que el sonido de este disco en 2005 era un abandono total de guitarras alegres que se reflejaban en el Vehicles & Animals. Supo destacar los matices del sonido nostálgico, orquestal y triste que enamoran cada vez que lo escucho.
En lo que corresponde a la versión CD, ofrecen en el segundo disco lados “B” y algunas versiones de temas como Half Light, Twenty Four Hours y Tourist.
Tourist es una atmósfera con letras puras y sinceras.
No me quiero empalagar en escribir sobre las 11 canciones que componen la obra de arte hecha por Pott, Willetts, Roberts y Wanstall; más bien, buscarles el sentido a los lados B, que le dan excusa al génesis de la celebración de las dos décadas.
El britpop, a flor de piel en estos lados B, me recuerda esa movida nacida con bandas como Suede, Thirteen Senses, Coldplay, The Verve y hasta un Radiohead en su onda Pablo Honey y The Bends.
Destaco canciones como Transformer Man, Never Running Out, I’ve Got a Question y Forest Fire.
Tourist 20 Aniversario: una banda sonora de cualquier película de este siglo
Cada canción representa momentos únicos que te permite reflejar películas, tanto así que, en el transitar de la escucha, me imaginé escenas donde un padre se despide de sus hijos hacia un gran viaje, o ese momento donde se consiguen esos enamorados que tienen años sin verse y sellan la incondicionalidad con una sonrisa y un beso.
En fin, creo que finalizo con el inicio de esta reseña. Me emociona que se celebren estos 20 años con el lanzamiento de este gran disco del 2005, siendo uno de mis discos “top” de la vida.
No le doy la puntuación perfecta porque realmente no soy amigo de los remixes, que muchas veces destruyen la magia de la canción.
Athlete, muchas gracias por este gran regalo.
9/10