Ryan Michael Reavis, quien previamente aceptó declararse culpable de distribución de fentanilo en el caso federal relacionado con la muerte de Mac Miller en 2018, ha sido sentenciado a casi once años de prisión.
Antes de dictar la sentencia de 10 años y 11 meses, el juez federal leyó una declaración de la madre de Miller, Karen Meyers. “Mi vida se oscureció en el momento en que Malcolm dejó su mundo”, dice el comunicado. “Malcolm era mi persona, más que un hijo. Teníamos un vínculo y un parentesco que era profundo, especial e insustituible. Hablamos casi todos los días sobre todo: su vida, planes, música, sueños”.
“Este no es solo un caso de drogas regular. Alguien murió y una familia nunca recuperará a su hijo”, dijo Reavis al tribunal. “Mi familia estaría destrozada si fuera yo. Nunca estarían bien, nunca realmente lo superarían. Pienso en eso todo el tiempo. Y sé que pase lo que pase hoy, soy el afortunado porque mi familia está aquí y yo estoy aquí y estaré con ellos nuevamente. Me siento terrible. Esto no es lo que soy. Mi perspectiva ha cambiado. Mi corazón ha cambiado”.
Miller fue encontrado muerto en su casa de San Fernando Valley, California, el 7 de septiembre de 2018. El rapero murió de una sobredosis accidental de fentanilo, cocaína y alcohol, según el informe de toxicología publicado por la oficina forense del condado de Los Ángeles. De acuerdo a un declaración emitido por el Fiscal Federal Nick Hanna en octubre, “Se ha vuelto cada vez más común para nosotros ver a los traficantes de drogas vender productos farmacéuticos falsificados hechos con fentanilo”.
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