La popular aplicación de vídeos cortos TikTok, propiedad de la compañía china ByteDance, está siendo investigada por el FBI y el Departamento de Justicia de los Estados Unidos. La investigación se lleva a cabo debido a que se ha descubierto que empleados de la empresa habrían espiado la ubicación de dos periodistas estadounidenses a través de la aplicación. La compañía ya había confirmado que había despedido a cuatro empleados implicados en el esquema de espionaje. La investigación aún no ha concluido y ByteDance ha recibido citaciones del Departamento de Justicia.
ByteDance se enfrenta a una creciente presión para vender su participación en TikTok. Si no lo hace, las autoridades estadounidenses amenazan con prohibir la aplicación en el país. En marzo de 2023, el gobierno estadounidense “exigió” que ByteDance vendiera TikTok. Aunque ByteDance había llegado a un acuerdo de asociación con Oracle y otras medidas destinadas a proteger los datos de los usuarios estadounidenses, el Comité de Inversión Extranjera en los Estados Unidos (CFIUS) ha pedido a TikTok que venda su participación en la compañía. Si no lo hace, la aplicación podría enfrentar una prohibición nacional.
Aunque ByteDance ha afirmado anteriormente que la desinversión de TikTok no abordaría las preocupaciones del gobierno estadounidense sobre la seguridad de los datos, Bloomberg ha informado que los ejecutivos de TikTok estaban “discutiendo la posibilidad de separarse de ByteDance” si las conversaciones con el CFIUS fracasaran.
TikTok en los Estados Unidos
El futuro de TikTok en los Estados Unidos sigue siendo incierto. A medida que la presión del gobierno para que ByteDance venda su participación en la aplicación aumenta, la empresa ha optado por despedir a los empleados involucrados en el espionaje a los periodistas y ha afirmado que cooperará con cualquier investigación oficial. Sin embargo, el problema de la seguridad de los datos de los usuarios estadounidenses sigue siendo una preocupación importante para las autoridades.
TikTok ha enfrentado críticas por su supuesta vigilancia y recopilación de datos de usuarios, lo que ha llevado a la especulación de que la aplicación podría estar compartiendo información con el gobierno chino. La compañía ha negado estas acusaciones y ha asegurado que almacena los datos de sus usuarios fuera de China.
El caso de TikTok y ByteDance es un ejemplo de la tensión cada vez mayor entre los Estados Unidos y China en el ámbito de la tecnología y la seguridad nacional. El futuro de TikTok en los Estados Unidos y la decisión de ByteDance de vender o no su participación en la compañía tendrán implicaciones importantes para el futuro de la industria de la tecnología y para las relaciones entre los Estados Unidos y China.