En una entrega cargada de nostalgia y sensibilidad, Vicencio Navarro presenta su versión de Cóncavo y Convexo, el eterno clásico popularizado por Roberto Carlos en 1984. Este lanzamiento, segundo adelanto de su próximo álbum Radio Aurora, reaviva el espíritu de una época dorada de la música latina, tejida con memoria, afecto y una estética sonora cuidadosamente actualizada.
El cantautor chileno no solo reinterpreta, sino que transforma, dándole a este himno romántico una nueva luz: la de una generación que creció entre cassettes, tareas escolares y la sintonía cálida de una emisora que marcó un tiempo.
Radio Aurora: una carta de amor a las canciones que nos criaron
Con estreno previsto para julio, Radio Aurora se perfila como un homenaje íntimo a los hits que definieron la atmósfera de los años setenta y ochenta en Chile. Un repertorio reinterpretado desde la emoción y el respeto, en el que Cóncavo y Convexo aparece como un punto de inflexión: una pieza que resume la esencia de un disco hecho con el corazón en el pasado y los pies en el presente.
Estas canciones eran el telón de fondo de nuestras tardes de infancia, comenta Vicencio. Y en su voz, la melodía de Cóncavo y Convexo adquiere una textura nueva, donde conviven el soul, el folk latino y una producción minimalista que realza cada matiz sin sobrecargarlo.
Una reinterpretación que habla en presente
La producción de este sencillo mantiene la sutileza de la versión original, pero le suma una profundidad emocional más introspectiva, como si cada nota tuviera el peso exacto de un recuerdo. Lejos de la grandilocuencia, Vicencio Navarro se adentra en una estética elegante, íntima y contemporánea, donde lo clásico se vuelve vigente.
En un panorama musical saturado de estímulos, esta versión de Cóncavo y Convexo invita a detenerse, a escuchar con pausa y a reconectar con ese rincón melódico que todos llevamos dentro.
